17 de agosto de 2011

Vagón 23.

Quizás yo buscara de algún modo esto. O de algún modo deseara acabar así. Todas las personas me repetían que un clavo saca otro, que cuando una puerta se cierra una ventana se abre, quizás un ventanal grande y luminoso con vistas al bosque. Pero, lo que entiendo, todo significa lo mismo. La vida es una real mierda, y tienes que esperar a que el destino te mande alguna cosa buena. Quizás deba de ser más positiva, atraer buenas vibraciones hacia mí. Pero dudo que sea tan fácil, tiene que tener alguna clase de truco que aun yo...
-Perdona.
-¿Qué? ¿Quién...?-
 Esboza una sonrisa cálida, que refleja mi vista aturdida en sus blancos e inmensos dientes. Luego, dice:
-Perdona, ¿Vas a coger ese libro?.
-Pues la verdad es que sí, créeme, lo necesito más que tú.-Sonrío y pestañeo rápidamente para creer lo que realmente estoy viendo delante de mí. Un chico alto, con ojos azul mar, un verde azulado que penetra tan dentro de mí, que siento una ligera punzada en el estómago. La biblioteca está en silencio, y la sección de drama-juvenil está desierta, desierta sin contar a aquel chico de ojos soñadores, y a mí.
-Yo pienso que no. Nadie es más desdichado en estos momentos. Oh, perdona, me llamo Dave, y no suelo venir por aquí.-Encoge los hombros y mira hacia su derecha a la vez que sonríe timidamente. Ese gesto hace que un mechón rubio platino caiga por su perfecta frente.
-No sabes lo que de verdad es tener una vida de pura pena. - Me tiemblan las piernas, así que hago un gesto de exasperación con la cabeza y me dirijo hacia una mesa de roble oscuro con el libro en la mano. Él me sigue a paso rápido, con sus perfectos movimientos y facciones. Coloca una silla junto a mi, sentándose con el respaldo sobre su cultural pecho, y apoyando sus brazos entrecruzados sobre la mesa. Luego sube la vista hacia a mí lentamente, haciéndome sentir un calor íntimo.
-¿Eres de por aquí?, Es decir, nunca te había visto caminar entre estos libros, si fuera de lo contrario, te recordaría, créeme.-Sonríe.
-¿No dijiste que no venías mucho por aquí?-Me muerdo el labio inferior y suelto una carcajada demasiado sonora. Se oyen varios "¡Chist!" de fondo.
-No lo suficiente. Por cierto, aun no me dijistes tu nombre.
-Bueno Dave, yo soy Remember Rosember.
-La pequeña Rose, ¿eh?.- Me gusta, para empezar de nuevo en una ciudad completamente distinta, sin duda era un nuevo nombre genial.
-Exacto. ¿Te apetece un café? No conozco a mucha gente de por aquí.
-Tendremos que coger el metro.-Hace una mueca.
-Prometo protegerte, si es eso lo que te asusta.-Me levanto con el libro entre los brazos, cuando me giro- ¡Eh, Dave!, ¿No necesitabas este libro para alegrar un poco tu vida gris?-Sonrío, de una manera que enseño todos los dientes.
-Ya me lo has alegrado, ya no lo necesito- Me guiña el ojo y me agarra la cintura.-¿Preparada?.-Asiento.

 Tras pasar toda la tarde en una cafetería, con cintas gratuitas del local en la frente, cintura y demás, me hago valiente y digo:
-¿Vives solo?
-Con un amigo, ¿ por?
-Estoy buscando piso y... Solo serían unos días...
-Tienes casa.-Subimos al metro de las once en punto, donde a tan altas horas de la noche, tan solo dos vagabundos y tres adolescentes borrachos navegan en el vagón 23.
Eh, Rose, yo...-Se acerca lentamente, haciendo que fuertemente nuestros labios se fundan, que poco a poco la violencia de aquel beso, se fue convirtiendo en un dulce y cálido beso. El vagón da un traspiés, y hace que su cuerpo me empuje hacia una vara y me choque la cabeza. Lo último que recuerdo, es levantarme en una cama con sábanas olor jazmín, y unas vistas impresionantes de un bosque verde.

3 comentarios:

  1. Qué mono es Dave :D
    Quiero uno como él!
    Por cierto, Remember: "Quizás deba de ser más positiva", no debe llevar la preposición "de".
    Y, "Por cierto, aun no me dijistes tu nombre". Es "dijiste". Sin ánimo de maldad, es sólo porque lo he visto y para que lo corrijas ahora, en algún futuro..
    Un saludo(:

    ResponderEliminar
  2. Me encanta :)
    Dicen que, cuando menos lo esperas, sale el sol. Supongo que fue algo así lo que le ocurrió a Remember. Y es que, aunque a veces parezca imposible, nunca nunca hay que perder la esperanza.
    Una entrada genial, sigue así. Espero tener pronto noticias de esta historia :)
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  3. Anonimo : Sabes? NO soy de españa, y me cuesta mucho hablar como os hacéis vosotros. Lo corregiré, lo siento.
    Naive : Gracias cielo, seguiré escribiendo (:

    ResponderEliminar